Deportes :Tenis de mesa
El tenis de mesa es una de las actividades más importantes dentro del deporte adaptado para personas con discapacidad física no sólo por el número de participantes, sino también por su enorme poder de integración.
Por sus características, el tenis de mesa es un deporte con un elevado número de jugadores con discapacidad participando en las diferentes ligas nacionales de la Real Federación Española en sus diferentes categorías. En los Juegos Paralímpicos de Barcelona 92, el tenis de mesa fue el segundo deporte en número de espectadores en directo, seguido por má¡s de 114.000 espectadores.
Es por ello, uno de los deportes que mejor consigue sus fines dentro de la rehabilitación complementaria de las personas con discapacidad, debido principalmente a que compagina reflejos, rapidez e inteligencia, además de requerir el empleo de un esfuerzo físico importante.
El tenis de mesa no solamente constituye una forma sana de hacer deporte, sino también un excelente medio de educación, ya que conjuga la labor individual con la de equipo, fusionando los valores personales y los colectivos.
La mayor parte de las personas con discapacidad que practican este deporte están integradas en clubes o asociaciones que no distinguen a jugadores con o sin discapacidad, permitiendo alcanzar un nivel de juego altísimo.
El tenis de mesa puede ser practicado por cualquier persona con discapacidad (tetraplejia, pará¡lisis cerebral, amputaciones, malformaciones severas, polio), lo que convierte a este deporte en uno de los mas practicados entre el colectivo. Además, el tenis de mesa permite a la persona con discapacidad el montaje e instalación del campo de juego, lo que ofrece una autonomía para su práctica que muy pocos deportes permiten. Asimismo, se puede practicar durante todo el año y el coste económico del material no es en absoluto significativo.
La competición
El tenis de mesa se practica en dos modalidades: de pie y en silla de ruedas. Tanto en una como en la otra se sigue el reglamento de la ITTF (Federación Internacional de Tenis de Mesa), con ligeras modificaciones para la modalidad de silla de ruedas: cuando se realiza el saque, la pelota debe salir por la lÃnea de fondo y no por los laterales; en los juegos de dobles, en cuanto se ha realizado el saque y la devolución es correcta, cualquier jugador puede golpear la pelota; además, un jugador puede apoyarse en la mesa para mantener el equilibrio, siempre y cuando no la mueva.
Las dimensiones de la mesa de juego son las mismas que las que se utilizan en el tenis de mesa tradicional: 2,74 m de longitud y 1,525 m de anchura, situada en un plano horizontal de 76 cm del suelo con un Área de juego de, como mínimo, 14 m de largo, 7 m de ancho y 5 m de altura delimitada por vallas de 75 cm de alto.
Debido a su gran complejidad, el deporte adaptado para personas con discapacidad intenta agrupar a deportistas con deficiencias similares, con el objeto de que al competir no exista ningún tipo de desventajas.
En el tenis de mesa, las deficiencias físicas se agrupan en torno a cinco federaciones: lesiones medulares (ISMWGF), polios, amputaciones, parálisis cerebral (CP-ISRA) y otras deficiencias (ISOD).