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María Paz Schwager: Suiza en el fin del mundo

Desde niña vino a Argentina. Hace 7 años se instaló en Tierra del Fuego. Practicó diferentes deportes pero se quedó con el futsal. Hincha del Rojo. Sueña con vivir del fútbol.

Por Maximiliano Marasso

Futbolistas nacidas en Europa compitiendo en nuestro país no son muchas. Suiza tiene sus representantes. Además de las hermanas Gissi (Maylis, en Independiente, y Shadya en Defensa y Justicia) DLF entrevistó a otra jugadora de aquellos lares.


Schwager nació el 17/6/1992, en Winterthur, Suiza. De allí era su abuelo. Tanto sus padres como hermanas son argentinas. A los 3 años se vino a nuestro país. Desde 1995 al 2013 vivió en Buenos Aires. Luego se trasladó a Ushuaia, Tierra del Fuego.

Tiene familia futbolera. Un primo, Facundo Cunsolo, que jugó en Italia. Además, el periodista deportivo Gustavo López es primo de su padre, padrino de su hermana. Le encantaría jugar en once, pero en Ushuaia no está la disciplina. Solamente puede futsal.

Estudios: Instrumentadora quirúrgica, pero tuve que abandonar porque la facultad era privada y no la pude bancar más.

Trabajo: Administrativa en una financiera.

Clubes: Casino de Suboficiales (2015), Campolter (2016-17) y Escuela de Futsal MB (2018-19). Cuando arranque todo otra vez voy a jugar en Ateneo con casi todo el plantel de MB –porque se desarmó – y chicas nuevas.

Inicios: Arranqué a jugar en noviembre del 2014, pero el torneo ya había terminado así que solo puede jugar torneos de verano que por cierto salimos campeonas de los tres. Ya en el 2015 de manera oficial. Jugó para las “K-si” el equipo de Fania Faedda, una de las que pioneras allí en la isla. En Casino conoció a Azul Pérez Zanone, jugadora-colega de DLF.

Puesto: Pivot. Pero también me gusta jugar de ala. Igualmente juego donde me pongan porque con el sistema de juego que adquirimos los últimos dos años aprendí a jugar en la posición que me toque estar.

Hincha: Independiente. Sería un sueño vestir la camiseta del Rojo. Y sé que es lo que a mi papá le hubiese gustado. Toda mi familia es de Independiente.


Selección local: Tuve un mini paso por la Selección de Tierra del Fuego cuando vino la Selección Argentina para acá en el 2017. La experiencia fue hermosa. Creo que cualquier persona sueña siempre con poder representar a la ciudad en donde vive. Acá el nivel es muy bueno así que me puso muy contenta haber estado convocada.

Para nosotras que estamos lejísimos de la realidad de Buenos Aires fue algo hermoso y se notó muchísimo la diferencia en el primer partido más que nada, después en el segundo la diferencia fue menos (risas). Tuvimos que viajar a Río Grande con las chicas de la selección así que fuimos todas juntas en el micro y pudimos conocernos un poco más.

Liga de Ushuaia: El nivel es muy bueno. Hay muchísimas chicas. El año pasado éramos 17 equipos entre la A y B. La diferencia se nota. Pero creo que eso pasa también porque hay falta de espacio para que los equipos puedan entrenar. Hay planteles que tienen que compartir con las inferiores, otras entrenan 1-2 veces a la semana pero en gimnasios de colegios que son súper chicos, y sino como nos pasa a nosotras que si queremos entrenar en una de 40x20 tenemos que pagar una cuota alta porque los espacios son privados y si bien es un esfuerzo de todos los meses, lo hacemos porque al fin y al cabo entrenar en un espacio acorde te beneficia.

Con respecto a la liga, el masculino siempre tiene prioridad. Ya sea en espacios, horarios. Lamentablemente al femenino acá no le dan la importancia que se merece. La organización no es de las mejores que digamos. Somos nosotras las que salimos perjudicadas. Igualmente hay gente que trabaja para el femenino gracias a Dios, pero no alcanza.

Otros deportes: Básquet y handball. Igual siempre quise hacer fútbol. Primero hice básquet y después handball en el club de mi barrio. Cuando terminábamos de entrenar nos poníamos a jugar con los chicos al fútbol. Admiro a la gente que puede vivir del deporte.

Cuarentena: Con mi novia y nuestros dos gatitos. La semana pasada tuve que volver a trabajar así que al menos veo gente, pero me está matando la cuarentena. Tengo unas ganas de entrenar, de jugar. Quiero que arranque el torneo ya, y lo veo tan lejano.

Películas: Comedia siempre, pero prefiero las series colombianas. Amo Colombia aunque no conozca (risas)

Comidas favoritas: Asado, papas fritas, rabas, pastas. Me encanta toda la comida salvo la pizza con ananá (Risas).


Estilo de ropa: Deportiva y urbana. Me encanta la ropa y amo andar en zapatillas, tengo muchas y tendría muchísimas más.

Virtudes: Me considero una persona optimista, alegre, compañera y siempre tiro para adelante a pesar de todo. Debe ser que la vida me obligó a ser así.

Defectos: Ser bastante dura conmigo misma. Me autoboicoteo y no confío del todo en mí.

Vicios:
Independiente.

Un sueño: Ser jugadora profesional, vivir de lo que a una le gusta debe ser maravilloso.

Jugadora admirada:
Lorena Benítez. Si bien la vi solo cuando vino con la Selección a jugar acá, la sigo en las redes y por lo que se ve es una persona que arrancó bien de abajo, humilde y a pesar de que ahora es una persona muy conocida, no se olvida de dónde salió. Además formó una familia hermosa.

Un lugar en el mundo: Colombia.

Un partido: Uh tengo miles. Pero el empate 1-1 contra Escuela Municipal D. Fue un partido intenso, lleno de muchas emociones y ahí se pudo ver bien el nivel de ambos equipos. Estuvo muy bueno a pesar de que no hubo ganadora.

Un gol: Mmm hice muchísimos aunque no creas, y me erré muchísimos también (risas). Pero me acuerdo uno que le hice a Mercantil B. Recibí la pelota en la mitad de la cancha, me di vuelta y le pegué al arco. Se la colgué a la arquera. Me acuerdo porque creo nunca más voy a hacer un gol así (risas). Mis goles suelen ser siempre acompañando al segundo palo.


Fotos vía diariolafutbolista.com

Fuente : https://www.diariolafutbolista.com